viernes, 7 de septiembre de 2007

Toque de Queda

Apago la luz. Me acerco al filo de la cama y me introduzco en ella…me acomodo. La sensación en el pecho se agudiza y el sudor empieza a invadir mi nuca. Oigo en el silencio los latidos de mi corazón. Qué preguntas me hago?....La puerta está lejos. Gritar no servirá de nada. El ritmo va en aumento. Me doy vuelta hacia la izquierda. Quiero conciliar el sueño. Difícil explicar el viaje a las tierras del miedo. El agua empieza a inundar la habitación.
Son lágrimas?
Sí. Mis lágrimas.
El llanto empieza a ahogar toda esta soledad. Preguntas, más peguntas.
Me cuestiono?
Por qué
por qué
por qué una y otra vez.
Una y mil veces más.
Me doy vuelta a la derecha. Mis párpados tiemblan sin dar muestra de cansancio. No estoy cansado. Solo hastiado de todo lo que no puedo hacer. Es demasiada carga.
Piensa, piensa.
Ya no quiero seguir pensando.
Ya no más, por favor.
Regresan las palpitaciones violentas. El dolor izquierdo se apropia de mi hombro y lo recorre hasta la axila. Continúa por la pierna. La puerta está demasiado lejos. Voy a quedarme aquí.
Por la mañana talvez toquen la puerta. Por la mañana sabrán que partí a escondidas.

En silencio.